Tener una casa con vistas despejadas, es el sueño de prácticamente todos los compradores de viviendas. Cuando tienes la suerte de vivir en una casa diseñada y construída en un acantilado, llevas este sueño al límite, pudiendo incluso ser una pesadilla para algunas personas con vértigo. Por suerte, ahora puedes darte un paseo por las 5 casas en acantilados más espectaculares, sin necesidad de poner un pie dentro. Si quieres saber lo que es vivir al límite, sigue leyendo.
Esta impresionante vivienda, de inspiración balinesa, se asienta sobre un acantilado, fusionando con maestría la estética del este de Asia con el encanto del entorno caribeño. Este espacioso inmueble, que abarca más de 300 metros cuadrados, se erige en la cima del acantilado, desde donde se contempla una pintoresca playa y se goza de espectaculares vistas panorámicas de 180 grados sobre el Océano Atlántico.
La mansión se destaca por su generosa terraza, ideal para tomar el sol o para refrescar la casa en verano, la cual alberga dos piscinas de borde infinito, una de mayor profundidad y otra más somera, divididas por una elegante pérgola. Además, la terraza ofrece un jacuzzi y un sereno estanque oriental, habitado por peces koi de colores.
Las cuatro habitaciones dobles, distribuidas alrededor de la terraza, presentan un exquisito mobiliario con dosel y están equipadas con aire acondicionado, ventiladores de techo y modernas cajas fuertes digitales. El dormitorio principal, con vistas a la piscina y al deslumbrante Océano Atlántico, incluye un baño privado tanto en el interior como en el exterior de la vivienda.
La Casa Paros es una casa minimalista ubicada en Paros, Grecia. La residencia se eleva en este terreno rústico como una ciudadela desde el horizonte costero en capas.
Ubicada en la cima de los impresionantes acantilados blancos de Dover, al sur de Inglaterra, esta antigua estación de guardacostas brinda a su afortunado propietario una panorámica vista de la costa francesa, que se extiende a casi 35 kilómetros de distancia.
Construida en la década de 1920 y meticulosamente decorada, esta encantadora edificación alberga un pintoresco salón de té en su último piso, así como dos dormitorios que se destacan por sus amplios ventanales con vista al mar y un balcón terraza.
No obstante, la verdadera joya de esta propiedad reside en su secreto mejor guardado: un búnker de la Segunda Guerra Mundial, oculto a 35 pies bajo tierra, que aguarda como un testimonio histórico inmerso en el pasado.
Este gran chalet de estilo mediterráneo, ubicado en lo alto de un acantilado, se extiende sobre su propio paseo marítimo, brindando vistas panorámicas al mar desde prácticamente todas las estancias de la casa. Al ingresar a esta finca a través de unas modernas puertas de seguridad, se despliega un patio central con espacio para estacionar hasta 10 vehículos, rodeado por un exuberante jardín mediterráneo decorado con macetas.
La propiedad está compuesta por dos unidades de vivienda distintas: la casa de huéspedes y la residencia principal.
La vivienda principal se inicia con un hall de recepción central, equipado con las más avanzadas tecnologías de seguridad para el hogar. La residencia principal también ofrece una piscina con vistas al mar, un dormitorio principal distribuido en dos plantas, que incluye un amplio baño con ducha y jacuzzi de hidromasaje, un estudio privado, un generoso vestidor y acceso directo al jardín.
En cuanto a la casa de huéspedes, consta de dos dormitorios con baño propio y una espaciosa área de estar y comedor de planta abierta, realzada por una acogedora chimenea.
Ubicada en White Salmon, Washington, Cliff House está cerca del río y del monte Hood, aunque está lo suficientemente elevada como para ofrecer vistas de largo alcance hacia arriba y hacia abajo del desfiladero.
Los arquitectos reutilizaron la huella básica de una antigua casa tipo rancho de un solo nivel protegida entre altos abetos sin alterar los árboles ni las formaciones rocosas existentes.
Vivir en una casa en acantilado puede ser maravilloso, pero también presenta desafíos. Los principales incluyen la necesidad de un mantenimiento adecuado para enfrentar la exposición al viento y la humedad del mar. Además, es fundamental evaluar la estabilidad del terreno, ya que los acantilados pueden ser propensos a la erosión costera.
Evaluar la estabilidad del terreno es esencial antes de comprar una casa en acantilado. Se recomienda contratar a un ingeniero estructural para una evaluación profesional. Debes considerar la geología del área, la erosión costera, y la capacidad del suelo para soportar la construcción. Esto ayudará a prevenir problemas futuros y a garantizar la seguridad de la vivienda.
España ofrece una variedad de ubicaciones impresionantes para casas en acantilados. Algunas de las mejores regiones incluyen la Costa Brava en Cataluña, las Islas Baleares, especialmente Mallorca y Menorca, y la Costa Vasca en el norte del país. Cada una de estas áreas tiene su propio encanto y vistas espectaculares al mar.
La erosión costera puede ser un problema para las propiedades en acantilados, ya que la exposición constante al mar puede causar la pérdida gradual de tierra. Es importante tomar medidas de protección costera adecuadas y realizar un mantenimiento regular para proteger la propiedad. Consultar con expertos en geología marina es aconsejable.
El proceso de compra de una casa en acantilado en España es similar al de otras propiedades, pero con consideraciones específicas. Involucra la búsqueda de propiedades, la negociación de precios, la firma de un contrato de compraventa y, finalmente, la escritura de propiedad ante un notario. Es fundamental contar con un agente inmobiliario con experiencia en propiedades en acantilados para guiar el proceso de manera efectiva.
6 min
8 min
4 min